TRATAMIENTO CON PARAFINA

La Parafina es un hidrocarburo combustible que se quema como carburante; tiene una combustión limpia y mantiene una salida de calor alto. Se extrae de las plantas, de la cera de abeja, y principalmente del petróleo crudo. Cuando está en estado sólido se denomina "Cera de Parafina", y cuando está en estado líquido se le conoce como "Aceite de Parafina".
Fuente: http://parafina.org/

Parafina

No solo es usada para hacer velas; entre otras cosas es usada como tratamiento de belleza.

Los tratamientos de belleza con parafina sirven para hidratar, humectar, y suavizar la piel a niveles profundos. La cera provoca el aumento del flujo sanguíneo, esto a su vez hace que la humedad de las capas profundas de la piel (la dermis y la hipodermis), se extienda a las capas superiores (la epidermis), para después regresar nuevamente a las capas profundas.

Se utiliza en tratamientos corporales y faciales, pero se aplica con mayor frecuencia en las manos y en los pies como complementos del manicure y del pedicure. Las manos siempre están expuestas a cambios de temperatura, el viento y el polvo; y los pies nos llevan y nos traen todos los días; estos factores entre otros, contribuyen a que la piel se reseque.

La cera de parafina es una cera suave y blanda que se calienta y se funde, para en ella sumergir las manos y los pies sin causar ardor o formación de ampollas. No es, ni se parece, a la cera que se utiliza para la depilación facial y corporal; ese tipo de cera es mucho más viscosa.

El proceso del Tratamiento con Parafina en manicure y pedicure consiste en derretir la cera en el recipiente calentador de parafina, para después sumergir las manos o los pies en la cera fundida en repetidas ocasiones, hasta cubrir la piel con una capa gruesa. Las manos o los pies se envuelven en plástico u otro material no absorbente, y se dejan reposar hasta que la cera se enfrié. Una vez que la capa de cera se endurece, se retira de una sola pieza sin usar esponjas ni agua.

Al término del tratamiento con parafina, la piel queda suave, tersa, sedosa, humectada, rejuvenecida y con mayor elasticidad. Es recomendado para todo tipo de piel; pero es ideal para pieles secas, agrietadas, ásperas y maltratadas.

Consejo: La Parafina no es recomendada para personas con diabetes, venas varicosas, o con heridas en la piel.



  
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